Una de las fechas importantes del viaje era la del año nuevo, que ya desde España teníamos claro que lo queríamos pasar en Las Vegas. Nos costó llegar..... 8 horas en coche atascados en la carretera del desierto para llegar allí, y no parábamos de ver coches de gente de nuestra edad (osea, veinteañeros en mi caso), que se iban a pegar la juerga de su vida, con la música a toda pastilla y fumando como cosacos.
Después de tanta carretera, conseguimos llegar a Las Vegas a tan sólo un día vista de año nuevo, lo cual nos daba ma
rgen de sobra para averiguar cómo funcionaban los chiringuitos, dónde estaban las bebidas más baratas y aprendernos las reglas del black jack para desbancar a los casinos, ilusos. Nos costó darnos cuenta que mientras estuvieras en el casino apostando, ya sea un céntimo a las máquinas tragaperras o 50 dólares (máxima apuesta diaria permitida por los pornotrip que luego nos hemos saltado alegremente, sobre todo después de varios gintonics), las bebidas son gratuítas. Eso sí, en las tragaperras hay que andarse con vista de lince para llamar a una camarera y además tener suerte para que no se haga la longuis, porque las propinas de los muertosdehambre como nosotros no son las mismas que dejan los millonetis en las mesas del poker a 100 dólares la apuesta mínima. Life is life.
Al final, te montas tu
estrategia para beber, y te das cuenta que dejando un dólar de propinilla la camarera te encuentra rentable y es cuando no te la quitas de encima, bieeeeeeeeeeeeen, pero al cabo de dos gintonics acaba siendo un problema. Viene a tu sitio cada 15 minutos y además te trae ya preparada tu bebida de siempre (como dioses) y encima el pelotazo sólo te cuesta un dólar, es imposible decir que no!!!! Trae pa´ca maja, que ese gintonic me lo bebo yo. Y esto, a cualquier hora del día, por la noche como que apetece más pero que si te quieres pimplar 4 wiskhys a las 9 de la mañana, is ok.
¿Qué pasa con las ganancias? ¿Después de tantas horas en la mesa sacas dinero? La respuesta es que NI DE COÑA, que no hemos ganado un chavo en ningun juego, en ningun casino, a ninguna hora, con ningun croupier. Y dices.... ¿cómo puede ser? Pues no lo sé, vamos que jugando a las 21 que es el juego más fácil de toda la historia resulta que sacas un black jack cada 5 jugadas, y la banca lo saca una vez sí, una vez no.
Nos hemos aficionado especialmente a la ruleta, y hasta e
l último día que un mexicano que andaba por allí nos contó un truquillo, la semana y media que hemos estado allí hemos apostado como nos ha ido saliendo sobre la marcha. Que si apuesta al 21 que tengo un feeling, que yo creo que ahora salen todos rojos, que me da a mi que ahora salen números más bajos.... uuuuuuuuuuuuuyyyy, y al final después de apostar 20 partidas seguidas al 10 te cansas y cambias a otro número, la baza siguiente sale el 10 y ganan todos menos tú, por g********s. Y dices: la cagaste Burt Lancaster, o lo mismo pero en inglés, you shit it Melannie Griffith.
A parte de nuestras
miserias en el juego, nos hemos pateado todos los hoteles porque no tienen desperdicio. El MGM, que es el hotel más grande del mundo y tienen un león de verdad allí metido, por eso de que el hotel es de la Metro Goldwyn Meyer. Luego está el New York New York, que para empezar tiene una montaña rusa que rodea los edificios que forman el casino, y tienen formas del empire state, las torres gemelas..... y por dentro la decoración es como las calles de Nueva York. Para decoración espectacular nos quedamos con dos hoteles, el Venetian y el París. El Venetian tiene canales por dentro, y te puedes montar en una góndola y el gondolero va remando y encima te canta un par de canciones. Y el París, que es el favorito de Jaime, que tiene la torre Eiffel a la entrada, tamaño casi natural, y por dentro tiene los techos pintados de azul con nubes, asi que parece que es de día todo el tiempo y
los pasillos del hotel son parisinos totales. Él Belaggio no nos pareció para tanto, por dentro está decorado un poco sosainas, muy elegante pero sosainas, aunque los shows de agua que tiene en la entrada son espectaculares, sobre todo por la noche porque entre el agua, la música y las luces te quedas allí alucinado. Además es el casino que se roban los de Oceans 11, y por supuesto nos hemos vuelto a tragar la peli, jeje.
En todos los hoteles había wedding chappels, pero eran muy pijas para nosotros, de hecho hemos visto varias novias casándose allí y vestidas de novia de verdad, de blanco con velo y ramo. Nostros estábamos buscando algo más cutre, una capillita con un Elvis o algo así y que no fuera muy caro, pero para eso hay que coger el coche e irse a alguna callejuela perdida así que decidimos no pasar por el altar. El dinero que nos ahorramos en nuestro intento de boda nos lo pensábamos gastar en algún show de por allí, que te cuestan unos 100 dólares por barb
a los que merecen la pena. Teníamos en la lista a David Copperfield y al Circo del Sol, pero al final encontramos un chollo con el que conseguimos una entrada gratis para ver a Chris Angel. Nos pararon en el Excalibur y nos ofrecieron ir a una presentación de unos apartamentos que iba a abrir el MGM y pasar allí una mañana a cambio de unas entradas gratis, nos vendemos fácil asi que nos apuntamos. Después de 5 horas diciéndole a la comercial que no queríamos una multipropiedad en Las Vegas para poder viajar por todo el mundo en nuestras vacaciones (que eso ya lo estamos haciendo), conseguimos nuestros tickets en la última fila, y por la tarde fuimos a ver el show "Believe" que Chris Angel tiene montado con los del circo del sol. Era una especie de show de magia con alguna aparición de los del circo del sol, nos gustó bastante, aunque nos quedamos con las ganas de ver a David Copperfield que ese ya es creme de la creme.
Os dejamos unas fotillos de nuestra
cena de Año Nuevo, que era uno de esos días en que ya
habíamos acordado que nos teníamos que pegar un homenaje de los buenos. Así que reservamos mesa en uno de los restaurantes del Sáhara, nuestro hotelillo allí, y nos pedimos nuestra buena botellita de vino. No tuvimos las 12 campanadas, pero sí unos fuegos artificiales impresionantes en el strip. Habían cercado toda la calle principal, donde están todos los hoteles, así que desde por la tarde era todo peatonal y la gente estaba como loca. Había puestos por toda la calle que te vendían margaritas gigantes (mirad qué vasos nos daban, te duraba el margarita 3 horas), y a las 12 todo el mundo se congregó margarita en mano para ver los fuegos artificales que lanzaban desde casi prácticamente todos los hoteles. Somos un poco capullines y nos cascamos un vídeo de 10 minutos de los fuegos y no sacamos ni una sola foto, pero fueron increíbles.
Mucho mas espectacular contado que visto en fotos. Paula, lo cuentas muy bien. Puedes dedicarte a escribir un libro el año que viene, os instaláis en alguna de las muchas playas por las que habeis pasado y ¡¡ otro año sabático !! . Besos. También os echamos de menos.